Ya hablamos de networking para el crecimiento empresarial. ¿Puede ser el networking una interesante herramienta también para practicar dentro de las empresas?
Sonia Fernández, autora de libros como Dos grados: networking 3.0 y pionera en el concepto «Networking», considera que «aportar a los demás es la mejor forma de construir tu network. El éxito en cualquier aspecto no está en el individuo ni en su visión centralizada del mundo. El éxito no depende tanto de nosotros, sino de la forma de relacionarnos con los demás y de la posición que ocupamos dentro de este conjunto de relaciones».
Cinco características básicas del networking podrían ser:
- El objetivo es generar una red de personas que puedan ser de interés para ti o tu negocio.
- Para ello hay que localizar a las personas más adecuadas.
- Contactar con ellas y darse la oportunidad de conversar de forma distendida.
- Se buscan acuerdos de colaboración, clientes, proveedores, financiación,…
- Se extraen ideas y oportunidades de mejora del negocio.
¿Qué pasaría si trasladamos estas características al interior de las empresas? Podríamos plantearnos algunas cuestiones:
- ¿Tengo determinada la red personas con la que te relacionas dentro de las empresa? El objetivo es generar una red de personas que pueden estar relacionadas contigo, con tu departamento o con tus intereses de proyectos en común, de promoción, de necesidades de documentación, etc.
- ¿Son las personas adecuadas? Localiza a las personas que puedan facilitar realmente tu trabajo y averigua cómo: los compañeros, los colaboradores, los managers, responsables de otros departamentos o áreas de negocio, los proveedores, los clientes clave…
- ¿Cuándo contacto con ellas? Quedar con ellas de vez en cuando, pasar por su despacho o mesa, compartir una comida o tomar un café, encontrar, en definitiva, el momento en el que poder hablar de forma distendida para que puedas conocer su trabajo y la relación que puede tener con el tuyo. Mantener la red de contactos al día es importante porque nunca sabes cuándo vas a necesitar de ellos.
- ¿Planteo los términos de la colaboración? Exponer claramente en qué pueden contar contigo, ofreciendo primero tú y luego pidiendo lo que crees que te puede aportar el otro, para llegar a un acuerdo confirmado por ambas partes.
- ¿Con ello puede mejorar mi trabajo? Incorporar personas a un proyecto o delegar tareas en otros puede ser de utilidad para agilizar o puede, en ocasiones, ralentizar procesos. Es recomendable buscar siempre la mejora del trabajo o del negocio, revisar la red de contactos y valorar con quién los proyectos y tareas avanzan y con quien se frenan. Quizá haya que buscar nuevas formas de trabajar que ofrezcan mejores resultados. ¡Ábrete a nuevas posibilidades!
Muchas veces, vamos adelante en proyectos con mayor dificultad o “buscándonos la vida” porque no sabíamos que otra persona en otro departamento sabe o puede hacer algo que nosotros necesitábamos. Por ello, será interesante el networking interno, para conocer a las personas que nos rodean y saber en qué pueden aportar a nuestro trabajo diario, y tenerlas en cuenta para futuras ocasiones.
De igual forma, dejarnos ver, dar a conocer lo que hacemos nosotros, ponerlo en valor y tener preparado nuestro discurso para cuando surja la ocasión, nos abrirá oportunidades también dentro de las empresa, porque no siempre nos gusta que contraten a otra persona para hacer una función para la que no sólo estemos preparados sino que lo estemos deseando!
¿Nos animamos a hacer networking dentro de nuestras empresas?
Te espero en el camino del crecimiento.
Raquel Bonsfills
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