Los seres humanos estamos en este mundo con una misión, cada uno habrá de descubrir la suya, y aunque algunos fallecen sin haber dado sentido a su existencia, otros como Neil Amstrong pisando la luna, sabían de la importancia de dejar huella en su paso por la historia de la vida.
Hay muchas formas de dejar huella:
Donaciones. Hay muchísimos proyectos interesantes a los que donar nuestro dinero o recursos. Desde investigaciones científicas que nos permitirán en el futuro saber aún más sobre el ser humano, sobre curas a graves enfermedades o sobre inteligencia artificial, hasta donaciones a proyectos de ayuda contra el hambre, la mejora de las condiciones físicas, mentales, emocionales, educativas o del bienestar de las personas y de los animales. Por ejemplo, parques infantiles creados con las donaciones de muchas personas que creyeron en el proyecto, mercados creados gracias a la financiación de los interesados, organizaciones no gubernamentales de diferentes ámbitos… Hay todo un amplio repertorio de opciones en las que poder aportar nuestro granito de arena. Elige aquel en el que quieras dejar tu huella.
Adopciones. No solo se puede adoptar a niños o animales en situaciones de orfandad, también se pueden mejorar condiciones tanto personales como sociales. En Estados Unidos, se puede adoptar incluso una autopista, porque así se financia, se mantiene y permite que muchas personas puedan desplazarse con mayor comodidad en sus traslados.
Ofrecer nuestro tiempo. El tiempo es el bien más preciado que existe. El tiempo es el que es y cada persona decide cómo emplearlo. Por eso aquello a lo que le dediquemos tiempo ha de ser importante. Lo de pasar el rato es solo estar un rato haciendo algo banal, algo a lo que no le damos mucho valor o no nos gusta demasiado. Parece que acompañar a alguien a hacer algo es pasar el rato, sin embargo, si tenemos que pagar a alguien para que acompañe a nuestros mayores en su día a día, o para que esté pendiente de nuestros niños, nos damos cuenta que es un tiempo valioso. Así que dedica tu tiempo a aquellas cosas en las que queramos estar, aquello en lo que queramos dejar nuestra esencia.
Business Angels, inversores y accionistas. Son todo diferentes formas de apoyar proyectos y empresas que necesitan financiación. En este caso son opciones lucrativas. Nadie dijo que dejar huella tenía que ser gratuito. Hasta ser una gran empresa o ser un gran proyecto hay mucho trabajo y personas que creen en ello. Y esas personas siempre sabrán que fueron ellas las que dejaron esa huella en el mundo. Pueden ser anónimos o conocidos. En este caso la clave está en la confianza en las personas que lo desarrollan y en la viabilidad que tenga su idea. Con locos creativos avanza el mundo. Y si no, que se lo digan a Steve Jobs o a Elon Musk. Te dejo unos consejos para saber cómo invertir mejor tu dinero.
Responsabilidad social. Somos seres sociales y lo que hagamos afecta a los demás. Por eso es importante crear empresas que ayuden en el desarrollo económico, ecológico, sanitario,… es decir, empresas que lleven a una mejora en la supervivencia del ser humano, al «bien estar» de las personas, a la creación de empleo y al crecimiento personal y profesional de todos y todas. Tenemos un planeta en el que convivir en armonía y equilibrio. La huella que dejemos influirá en el futuro de nuestros sucesores.
Huella digital. En este mundo cada vez más tecnológico y más hiperconectado, ofrecemos una imagen que se corresponde con lo que ven de nosotros en las redes sociales, en los informes de las empresas que utilizan las herramientas de Big Data, etc. Las páginas web en las que entramos, fotos que subimos a Instagram, post, artículos, vídeos compartidos, textos escritos,…todo habla de nosotros. Nuestra educación, nuestra imagen, a lo que damos importancia y a lo que no, lo que compramos, lo que decimos que nos gusta, lo que rechazamos. Hoy en día esta huella digital influye incluso a la hora de encontrar un trabajo, dado que las empresas de selección cada vez más utilizan las redes sociales para conocer a sus candidatos. Muchas empresas y profesionales por eso se valen de expertos en social media para asegurarte que no se desvirtúa su huella digital. Así que, ¡echa una mirada a tu huella digital!
Nuestra actitud. ¿Te ha pasado que ha entrado una persona en la estancia en la que tú te encontrabas con una sonrisa radiante, con confianza, con alegría y te has quedado un rato pensando en ella? Eso es actitud. Podemos decidir cómo tomarnos lo que nos ocurre, hacer un drama de ello o dejarlo pasar, e incluso reírnos de lo ocurrido. Nuestra actitud nos va a acompañar donde vayamos y podremos dejar huella en los demás. Victor Küppers nos lo explica en este vídeo:
Nuestro comportamiento. Al final obras son amores y no buenas razones, que dice el refrán. Lo que hacemos, lo que no hacemos, lo que decimos y no decimos, cómo lo decimos, dónde estamos y a dónde no vamos… Nuestra forma de actuar con los demás, va a marcar la diferencia para dejar huella en ellos. Para bien y para mal. Así que descubre cuál es ese recuerdo que dejas en los demás y si es el que quieres sigue así y si no, cambia y sé quien quieres ser.
Nuestros valores. Si te das cuenta cuando alguien muere hablamos de esa persona diciendo que era una persona honesta, fiel, responsable, respetuosa, amigable… son todo valores. Por eso, es importante reconoces nuestros valores y actual con coherencia respecto a ellos. Igual que en la cultura empresarial una parte importante de la identidad está relacionada con los valores, en las personas también es importante detectar nuestros valores para llevarlos a nuestro día a día. Y que en cada acción que realicemos, nos aseguremos de ponerlos en práctica. Hemos ayudado a muchas personas y empresas a analizar sus valores. La mayor parte de las personas nunca ha tenido la oportunidad de analizar lo suyos y hasta no hacerlo no han descubierto lo importantes que son y lo beneficioso de aplicarlos. Si quieres descubrir los tuyos o los de tu empresa, ya sabes dónde encontrarnos.
Seguro que conoces más formas de dejar huella. Solo recuerda que puedes dejar huella cada día, en cada momento, y que puedes elegir dónde ponerla. ¿Qué vas a hacer a partir de ahora?
Tu también puedes dejar huella en la historia
Raquel Bonsfills
0 comentarios